lunes, 28 de febrero de 2011

Qué cámara compro.

Esta pregunta tiene dos posibles respuestas: la primera seria comprar una cámara normalita y barata para salir del paso "no sea que no me guste y se quede en el fondo del armario". La otra respuesta seria que la mejor que te puedas permitir. Por qué? facil, si te gusta, cambiarás a una cámara superior, cambiarás a una lente más luminosa y nítida, etc, y luego qué pasaria con el material comprado anteriormente? venderlo a mitad de precio, regalarlo? Ahí lo dejo caer...

Qué marca compro? Hoy en dia cualquier marca puede dar muy buenos resultados. El elegir Nikon, Canon, Sony, etc. va más ligado a la fama, sobre todo las dos primeras que son "las de toda la vida" y a tener mayor cantidad de seguidores, claro está, por llevar más tiempo en el mercado. Es la eterna discusión entre usuarios de unas marcas y otras.

Hay muchos foros en los que se puede conseguir gran diversidad de opiniones, pero no siempre de forma objetiva. Lo ideal seria ir a una tienda en la que poder probar varios modelos y ver qué tal nos sentimos, tanto de ergonomia como de acceso a menús, botoneras...


Compacta o réflex?


Ambas tienen pros y contras. Las compactas, como su nombre indica, son mucho más pequeñas y portables. Los avances técnicos han conseguido máquinas realmente pequeñas que se pueden llevar en un bolsillo sin estorbar casi. Tiene buena calidad de imagen y bastantes controles. Por contra, los accesos a los parámetros de configuración suelen ser engorrosos y lentos de acceder. Además, desde que apretamos hasta que se realiza la foto, puede pasar un tiempo que en fotos de acción puede significar el haber perdido una foto espectacular

Las réflex son bastante más voluminosas y pesadas, no pasan desapercibidas y además son caras. Sin embargo, el hecho de tener un control casi absoluto de la velocidad, apertura, iso pero sobretodo la calidad de la imagen hace que mucha gente se decante por este tipo de máquinas.


"Ya tengo mi cámara, y ahora qué?"


Lo primero, y por pesado que pueda ser, no toca otra que leer el manual. No por dificultad de uso para hacer fotos en modo automático, sino por que tenemos una cámara que nos ha costado un esfuerzo económico y queremos sacarle todo el jugo. Recomendable rescatarlo del cajón de vez en cuando.

Segundo, comprar un filtro neutro. Esto es un filtro que se enrosca en el objetivo y no hace nada, bueno sí, proteger el primer cristal de nuestro objetivo, tanto de gotas de agua como polvo o sobre todo golpes desafortunados. Si tenemos que limpiar o quitar manchas resistentes, mejor de un filtro de 30€ (por poner un precio) que de un objetivo de 150€ tirando bajo.
Hay quien está en contra de esta práctica, ya que "si me compro un objetivo caro para conseguir mejor calidad, poniendo otro cristal delante le quito luminosidad, nitidez, etc". Por cierto, la fotografía es un hobby carillo y puede viciar.

Un filtro polarizador también vendria bien tener. Este filtro polarizador (filtro UV, ya se ha hablado antes de él) lo que hace es filtrar (una galletita para mí) la luz del sol directa como reflejada. Con este filtro conseguimos quitar los reflejos de cristales, superficies del coche, tener un color más saturado en la naturaleza y para usuarios más avanzados puede quitarnos un poco de luz que puede ser útil en según qué ocasiones. Tiene un pequeño inconveniente y es que con objetivos de gran angular, nos puede provocar viñeteo. Esto es el oscurecimiento de las esquinas. Con luz artificial el filtro polarizador no tiene ninguna utilidad.

Los precios de los filtros varian bastante entre marcas, modelos y diametro. Cuanto mayor es el filtro bastante mayor es el precio.

Por suerte o por desgracia en la fotografia la calidad, casi siempre, va directamente ligada al precio.


Una observación completamente personal es que mientras la gráfica de calidad de un objetivo lo hace de forma logarítmica, el precio lo hace de forma exponencial y aqui tendrá que ser el usuario, sus necesidades y posibilidades económicas el que deberá decidir cuál es el equilibrio.

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